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8 de mayo de 2019
El crimen ocurrió en Estados Unidos. La madre de la víctima fue acusada de homicidio en primer grado y por abuso infantil. Será sentenciada el próximo 22 de julio. El padre del menor, irá a juicio a fin de año acusado de asesinato. Detalles macabros.
Una madre en Arizona,
Raquel Barreras, de 44 años y residente de Tucson, fue condenada por el terrible crimen el viernes pasado y será sentenciada formalmente el 22 de julio.
Mark Weisbord, un hombre que había comprado la propiedad donde anteriormente vivía la mujer junto a su familia descubrió en marzo de 2014, los restos del pequeño Roman Barreras. Se cree que nene murió en algún momento entre la primavera de 2013 y enero de 2014.
La autopsia estableció que Roman murió de abandono y hambre. Virginia Aspacher, una de las involucradas en el estudio, reveló: “Le llevó mucho tiempo morir. Le tomó mucho tiempo morir de hambre y ella lo vio hacerlo. Lo único que podemos hacer es justicia”.
Barreras se declaró culpable del crimen, pero su defensa argumentó que era un blanco fácil porque era una madre adicta a las drogas que vive en la pobreza.
Su hermana declaró en el juicio en el condado de Pima County que Barreras dijo que el chico había sido “muy, muy malo”, razón por la cual fue puesto dentro del baúl de juguetes. A sus cuatro hermanos no les permitió jugar con él.
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